Llegó Cristiano Ronaldo acompañado de su pareja, Georgina Rodríguez, a la Audiencia Provincial de Madrid para hacer frente un juicio de conformidad y aceptar el pacto que hizo con Hacienda meses atrás por los cuatro delitos fiscales que perpetró en 2010 y 2014, cuando era jugador del Real Madrid, defraudando al fisco por 5.7 millones de euros (más de 124 millones de pesos).
De esta manera, el deportista portugués reconoció ante una audiencia que duró escasos minutos ser condenado a 23 meses de prisión, mismos que no cumplirá en ese lugar, y a una multa de 18.8 millones de euros (más de 400 millones de pesos) para saldar su deuda.
En este pacto, la Fiscalía manifiesta que el ahora delantero de la Juventus reconoció que se aprovechó de una estructura societaria instituida en 2010 para ocultar a Hacienda las rentas generadas en España por los de derechos de imagen.
Al terminar este proceso en Madrid, Cristiano Ronaldo se mostró tranquilo ante los medios, y con una gran sonrisa únicamente expresó: “Todo perfecto, ya está, ya está”.